lunes, diciembre 13, 2010
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| Personal de salud del hospital Jaime Mota, asisten al niño |
Benny Rodríguez
Barahona.- Falleció en momentos en que se disponía su traslado a un centro médico de la ciudad Capital un jovencito de 10 años, herido de un balazo en la cabeza cerca de las once de la noche de este domingo al producirse un pleito entre dos bandas en el sector El Cacique, del barrio Palmarito, de la parte alta de esta ciudad.
El jovencito muerto corresponde al nombre de Carlos David Pichardo Féliz, hijo de Pedro Pichardo, quien reside en la calle Alcides Veloz, 70 de Palmarito lo que generado muchas lamentaciones por el deceso del niño, sobre todo, su maestra de cuarto grado de la escuela primaria Jaime Mota, quien en llanto reconoció el talento y lo respetuoso del niño fallecido.
El adulto que resulto herido durante la refriega entre delincuentes que mantienen en zozobra a este sector de la parte alta de este municipio, es David Pérez Suero de 42 años, quien de acuerdo al reporte de los médicos que les atendieron en el hospital regional universitario Jaime Mota, recibió una herida de bala en el hemotórax derecho con entrada sin salida, residente en la calle Cuarta del sector El Cacique.
El parte médico da cuenta que el menor Pichardo Féliz recibió el disparo en la cabeza con orificio de entrada y salida, en momentos en que se producía una pela a balazos entre los integrantes de las mencionadas bandas hecho acaecido a noche cerca de las once de la anoche.
El niño que cursaba el cuarto grado de la educación básica en la escuela primaria Jaime Mota fue llevado en estado agónico a la emergencia del centro médico público sin que los profesionales de la medicina, a pesar de los esfuerzos por devolverles la vida no pudieron salvarle, muriendo en momentos en que iba a ser trasladado a la Capital a un centro especializado.
Pérez Suero, quien resultó con una herida de bala en el hemotórax fue referido de urgencia al hospital regional Taiwán, que funciona en la provincia de Azua de Compostela.
Al centro de salud de aquí se presentaron los oficiales, capitán López, el teniente Cuello, entre otros quienes investigan el hecho de sangre que ha llenado de rabia, llanto y dolor a los habitantes del sector El Cacique del barrio Palmarito ante los frecuentes enfrentamientos entre bandas sin que haya intervención de las autoridades policiales y judiciales.
Luego, varias unidades policiales, acompañados de militares, acudieron a la escena del crimen a recoger casquillos y otras evidencias para iniciar las indagatorias de lugar y dar con los responsables de este hecho criminal.
Maestra rompe en llanto
Decenas de personas de ambos sectores, acudieron hasta el hospital regional universitario Jaime Mota a indagar sobre el estado de los heridos, entre los cuales se encontraba profesora Miguelina Morales, maestra del niño fallecido en la escuela primaria Jaime Mota, estallando en llanto al conocer la infausta noticia de la muerte del menor de 10 años, aprovechando para entre sollozos reclamar justicia ante este caso.
El menor, que cursaba el cuarto grado de la primaria en la referida escuela en sus llantos la profesora exclamaba que el niño era un estudiante excelente, aplicado, respetuoso y obediente, razón por la cual espera que las autoridades policiales y judiciales puedan atrapar a sus verdugos.
Paradoja
Como una paradoja y sorpresa que da la vida este hecho de sangre, que ha empañado las navidades en uno de los sectores más populosos de la ciudad, ocurre en momentos en que el jefe local de la policía, general de brigada Rafael Calderón Efres, dijo que dispuso un aumento del patrullaje y la vigilancia, precisamente, para evitar crímenes como estos, así como atracos y violaciones de propiedades.
Sin embargo, el crimen de anoche es un desafío a la Dirección Regional Sur de la Policía Nacional que ocurre en momentos en que ciudadanos y ciudadanas exigen más protección y vigilancia policial.
